¿Qué es el bótox?
La toxina botulínica o bótox es un tratamiento que se considera excelente para tratar las arrugas de expresión. Es un complejo proteico natural purificado, que se inyecta en el rostro, de forma prácticamente indolora y que provoca un relajamiento temporal y reversible de los músculos o de las porciones musculares que originan esas arrugas. Sin duda, la aparición y aumento de arrugas en el rostro, son los signos más claros del envejecimiento. Este fenómeno se produce de manera paulatina por el envejecimiento de nuestro organismo o por movimientos repetitivos de los músculos faciales. Cuando estos músculos se contraen continuamente y dan lugar a expresiones, arrugas o surcos, dan un aspecto envejecido al rostro. La toxina botulínica o bótox es eficaz paliando el envejecimiento cutáneo producido por las arrugas.
¿En que arrugas está indicada la toxina botulínica o bótox?
El bótox debe usarse adecuadamente, y sólo debe aplicarse con fines de estéticos en el tercio superior del rostro. En estas zonas, es común en todo tipo de arrugas de expresión, las más frecuentes:
- Las arrugas del entrecejo (líneas glabelares).
- Los surcos pronunciados en la frente.
- Las patas de gallo.
El tratamiento con bótox, obtiene como resultado una atenuación de las arrugas y líneas de expresión, además de un rostro más relajado y juvenil. Si se aplica en el contorno de los ojos, consigue rejuvenecer la mirada, prevenir la caída del párpado y atenuar las líneas del entrecejo.
¿Requiere alguna preparación previa el tratamiento con bótox?
Para conseguir un efecto positivo, es necesario estudiar la mímica de cada rostro antes de la aplicación. Así, se consigue dar armonía y eliminar lo negativo. No sólo se trata de eliminar las arrugas, sino hacerlo de la forma adecuada. Por ello es conveniente:
- Realizar una evaluación y diagnóstico del paciente: es imprescindible conocer la historia clínica del paciente. El médico encargado de aplicar el bótox, debe saber los antecedentes patológicos de cada paciente, así como la medicación que toma, hábitos alimentarios, hábitos tóxicos actividad física, exposición solar y tratamientos estéticos anteriores entre otros.
- Clasificación del paciente: lo haremos según el fototipo y el grado de fotoenvejecimiento.
- Consentimiento informado: en el que deben explicarse los riesgos tanto frecuentes como infrecuentes de la aplicación del producto para que el paciente pueda consultar sus dudas antes de autorizar la realización de la técnica.
- Plan terapéutico: para conseguir un rejuvenecimiento activo de la piel, el bótox puede combinarse con otros tratamientos para mejorar la calidad de la misma, como peelings de luminosidad, hidrataciones con ácido hialurónico, láser de rejuvenecimiento, etc., mejorando de esta manera el resultado final y su mantenimiento en el tiempo.
¿Qué duración tienen sus efectos?
El resultado visible, normalmente se consigue a partir del tercer día, pero en ocasiones puede tardar hasta 2 semanas en aparecer. El efecto dura de 3 a 6 meses y es un tratamiento seguro y eficaz. A partir de los 6 meses el paciente puede volver a realizarse otro tratamiento y esta vez el efecto suele ser más duradero.
¿Son complicados los cuidados posteriores de la aplicación del bótox?
La única precaución que se debe tener después de la aplicación, es no tocar la zona de aplicación durante 4 horas aproximadamente, y procurar no tumbarse en el mismo plazo de tiempo para que la toxina inyectada no se difunda hacia zonas no deseadas. Una vez pasado este tiempo, se pueden reanudar sin problema las tareas habituales, trabajo, salidas de ocio, etc.
¿Tiene otras aplicaciones terapéuticas el bótox?
Antes de emplearlo con fines estéticos, el bótox se empleaba con frecuencia y éxito en otras patologías médicas. Las más frecuentes:
- Tratamiento de la sudoración excesiva (hiperhidrosis).
- Reducción de la incontinencia urinaria en personas parapléjicas
- Tics asociados al Síndrome de Tourette
- Blefaroespasmos o movimientos constantes e involuntarios del párpado
- Temblores, rigidez, algias vertebrales
- Mejoras del estrabismo sobre todo en niños.
La Dra. Garrigós es la doctora encargada de la unidad de Medicina Estética Facial del Centro Dermatológico Estético