El cuello, es una parte muy olvidada del cuerpo, que realmente suele estar a la vista prácticamente todo el año, y más en el clima en el que vivimos. En realidad, pocas personas se preocupan de tonificar, hidratar, o incluso protegerlo del sol, y con el paso del tiempo, el fotoenvejecimiento cutáneo se hace visible y es entonces cuando empieza a desagradarnos y nos preocupamos por cuidar el cuello.
Hoy os ofrecemos varios consejos y tratamientos dermoestéticos para mantener un cuello diez.
Lo primero para cuidar el cuello es la prevención
Si tu cuello todavía presenta un aspecto joven, terso y saludable, es importante que empieces a protegerlo frente al paso del tiempo. Puedes proteger el cuello mediante protectores solares con alto índice de protección cada mañana antes de salir de casa. Es importante también, que lo hidrates y tonifiques de la misma manera que te encargas diariamente de hacerlo con la piel del rostro. Realizando estos simples rituales, puedes prevenir el fotoenvejecimiento cutáneo del cuello y mantenerlo perfecto durante muchos más años.
Unifica el tono de la piel de tu cuello con plataformas láser
Normalmente el sol juega malas pasadas si no se ha llevado una pauta de protección de la piel adecuada, y puede dar lugar a diferentes lesiones (no necesariamente patológicas) que envejecen el cuello. Las lesiones más frecuentes que envejecen cuello y escote son los léntigos solares y poiquilodermia en los laterales del cuello.
- Los léntigos son pequeñas zonas pigmentadas en la piel con bordes claramente definidos, rodeados de piel de apariencia normal. Es una hiperplasia de melanocitos benigna, que se propaga de forma lineal, y generlamente (exceptuando los casos de léntigos malignos), se tratan con fines estéticos. Estas lesiones en cuello pueden tratarse durante los meses de invierno con una plataforma láser para pigmentos (Láser Alejandrita, Láser Pico Way, Láser Rubi). Según la profundidad de las lesiones, el tamaño y el tiempo de evolución, se necesitarán entre 1 y 3 sesiones para su completa eliminación, pero ofrece excelentes resultados, combinándolo en caso necesario con la plataforma vascular para eliminar la poiquilodermia.
- La poiquilodermia de Civatte es un signo del fotoenvejecimiento caracterizado por una dermatosis que presenta hiperpigmentación, atrofia o adelgazamiento de la piel y dilataciones de los vasos superficiales (telangiectasias). Cuando hablamos de poiquilodermia de civatte, nos referimos a las lesiones descritas que aparecen en las zonas expuestas al sol de forma crónica como las mejillas, el escote y el cuello, más frecuente en mujeres de entre 40 y 50 años. No se considera una enfermedad de la piel como tal, pero sí un problema estético. Hablamos de una manifestación cutánea íntimamente relacionada con el sol y el efecto lupa de los perfumes, por lo que puede confundirse con una alergia. El estado de la piel puede mejorar realizando tratamientos con láser de colorante pulsado (V-Beam II, Cynergy Multiplex…), para tratar la vascularización de la zona y la rugosidad y afinamiento de la piel, por su efecto colágenopoyético.
Simplemente realizando una unificación del tono de la piel del cuello, ya se consigue un rejuvenecimiento activo del mismo.
Si te martiriza la papada, elimínila, ahora puedes hacerlo sin cirugía
Belkyra®, es el único tratamiento inyectable no quirúrgico capaz de disolver la grasa bajo la barbilla y reducir la flacidez que suele quedar después. Al inyectarse en la grasa subcutánea, destruye las células grasas. Esta destrucción impide que se vuelvan a llenar de grasa, contra otros métodos que vacían estas células pero no las eliminan por completo.
La realización del procedimiento es sencilla, sólo consiste en realizar microinfiltraciones del producto en las células grasas. Es ligeramente molesto, pero puede realizarse con anestesia local. En las 72 horas posteriores, se puede notar hinchazón, picor, enrojecimiento… pero a diferencia de una liposucción convencional, el paciente se puede incorporar a sus quehaceres diarios prácticamente de inmediato.
Belkyra® se considera el único tratamiento no invasivo para el tratamiento de la papada aprobado por la FDA. Ha sido sometido a rigurosos estudios científicos para comprobar su eficacia a largo plazo. Se puede combinar con otros tratamientos para la elasticidad del cuello como Profound.
Cuidar el cuello mejorando la flacidez y el óvalo facial con Profound
Una vez unificado el tono y eliminada la papada, podemos seguir cuidando nuestro cuello realizando un tratamiento intensivo con Profound, un sistema de radiofrecuencia profunda que estimula la formación de los tres componentes vitales en la piel (elastina, colágeno y ácido hialurónico).
Cada sesión se puede personalizar según el paciente y su afección cutánea. Tiene múltiples zonas de actuación, pero por el tema que nos ocupa tiene especial efecto terapéutico sobre el exceso submandibular y en pliegues de cuello y escote. Es un tratamiento adecuado para todo tipo de piel.
El tratamiento se realiza en una sola sesión, y esta única sesión produce un efecto de curación con un aumento de colágeno y elastina apreciable en 10 semanas tras el tratamiento. De este modo observamos resultados clínicos en la flacidez de la piel, y arrugas profundas.
Si has conseguido tu objetivo, no olvides seguir protegiendo tu cuello
Si todos los tratamientos han conseguido que recuperes la juventud en la piel de tu cuello y que te sientas mejor, no olvides volver al primer paso, y cuidar el cuello protegiéndola del sol e hidratándola y mimándola como se merece.